miércoles, 20 de agosto de 2008

OsO-limpiadas





Existe la Suerte?

No es raro escuchar decir a alguien 'Que mala suerte tengo!' pero, existirá el azar como tal? un tipo que se considere con mala suerte solo se sentirá así si se compara con alguien a quien le sonría la casualidad, en otras palabras, los desafortunados solo son un marco de referencia para los afortunados pero lo que estos ultimos no saben es que lo son hasta que es demasiado tarde, muchos dicen ayer estaba mejor que hoy pero necesitaron que fuera hoy y que una pena les embargara para que realizaran que tenían suerte pero ya es pretérito, 'tuvieron' suerte, ya lo he dicho antes, las personas nunca están satisfechas, nunca están a gusto como Dios las tiene, se quiere lo que ya se perdió, el tiempo pasado que fué mejor, se envidia lo de los demás , en resumen, la grama del vecino siempre es más verde.

Conozco a alguien que solía decir, el 'hubiera' es de tontos, desde la primera vez que se la escuché decir, nunca se me olvidó (y fue hace más de 10 años!) y si le ponen coco tiene razón! que se puede hacer cuando ya pasó el momento oportuno? no se puede hacer nada por arreglarlo! que es lo que hubiera pasado, que es lo que no hubiera pasado (el famoso 'what if' de los gringos) si bien eso no tiene remedio, lo que si puede evitarse es la frustración, esa sensación de impotencia cuando nos sentimos desdichados, vivamos el momento, disfrutemos nuestra 'suerte'


Cabe un comentario complementario, ademas de hubiera, el arrepentirse no es valido.

Es preferible ser actor que espectador.

SALUDOS.
EXITO

lunes, 18 de agosto de 2008

LA TRISTEZA Y LA FURIA

En un reino encantado donde los hombres nunca pueden llegar, o quizás donde los hombres transitan eternamente sin darse cuenta...
En un reino mágico, donde las cosas no tangibles, se vuelven concretas.
Había una vez... un estanque maravilloso.
Era una laguna de agua cristalina y pura donde nadaban peces de todos los colores existentes y donde todas las tonalidades del verde se reflejaban permanentemente...
Hasta ese estanque mágico y transparente se acercaron a bañarse haciéndose mutua compañía, la tristeza y la furia.

Las dos se quitaron sus vestimentas y desnudas las dos entrarontristeza.jpg al estanque.
La furia, apurada (como siempre esta la furia), urgida -sin saber por qué- se baño rápidamente y más rápidamente aún, salió del agua...
Pero la furia es ciega, o por lo menos no distingue claramente la realidad, así que, desnuda y apurada, se puso, al salir, la primera ropa que encontró...
Y sucedió que esa ropa no era la suya, sino la de la tristeza...
Y así vestida de tristeza, la furia se fue.

Muy calma, y muy serena, dispuesta como siempre a quedarse en el lugar donde está, la tristeza terminó su baño y sin ningún apuro (o mejor dicho, sin conciencia del paso del tiempo), con pereza y lentamente, salió del estanque.
En la orilla se encontró con que su ropa ya no estaba.
Como todos sabemos, si hay algo que a la tristeza no le gusta es quedar al desnudo, así que se puso la única ropa que había junto al estanque, la ropa de la furia.

Cuentan que desde entonces, muchas veces uno se encuentra con la furia, ciega, cruel, terrible y enfadada, pero si nos damos el tiempo de mirar bien, encontramos que esta furia que vemos es sólo un disfraz, y que detrás del disfraz de la furia, en realidad... está escondida la tristeza.